Los sindicatos combativos, el movimiento piquetero y sectores en lucha contra el plan Milei, convocamos este jueves 9 de mayo en todo el país para exigir a la CGT y las CTAs la continuidad de un plan de lucha, que comience con un paro activo de 36 horas para derrotar el plan de Milei y el FMI, y cuando se trate la ley en Senadores que movilicen masivamente a los trabajadores. En Concepción del Uruguay concentramos a las 10 hs. en plaza Ramírez. Tenemos que ganar la calle, como fue el 23 de abril por la universidad y la educación pública.
La Ley Bases, logró media sanción en Diputados y otorga enormes beneficios a los capitalistas: facilita la fuga y el lavado de fondos ilegales, rebaja impuestos a las mineras y permite aumentar los precios a las petroleras sin ningún control, entre otras cosas. En contraste, el capítulo laboral precariza aún más la contratación, abre paso a la sustitución de las indemnizaciones por un fondo como el de la Uocra (que paga cada trabajador), quita la protección legal a los despidos discriminatorios y elimina la estabilidad de la planta permanente en el Estado con la consiguiente privatización de organismos y empresas del Estado. También restituye el pago de Ganancias sobre los salarios y anula la reinstalación de trabajadores perseguidos, atacando la organización sindical que es la base del movimiento obrero y sus luchas.
Mientras el gobierno acaba de decretar un salario mínimo de indigencia (234 mil pesos para mayo), pulveriza las jubilaciones y los programas sociales y sigue negando toda asistencia a los comedores populares. La inflación volvió a ser la más alta del mundo, siguen los aumentos del transporte, la luz, el gas y la nafta. Lo único que no aumentan son los salarios, jubilaciones y programas sociales.
Lo que permite que el plan de Milei avance es la complicidad de los partidos políticos que se dicen de oposición; tanto los que acompañan con sus votos – el PRO, la UCR y sectores del peronismo – como los que pronuncian discursos, pero rechazan enfrentarlo con la movilización popular.
Aun así, los conflictos y las movilizaciones se multiplican. El punto más alto fue la histórica movilización universitaria en todo el país en defensa de la educación pública, con más de un millón de personas en todo el país, con la AGD y el movimiento estudiantil a la cabeza; el Sutna inició un plan de paros y acciones por su paritaria y contra los despidos; se suman los ferroviarios, Ademys y otros sindicatos docentes en varias provincias; los aceiteros, los portuarios, los aeronáuticos, estatales, los trabajadores del INCAA junto a trabajadores de la cultura, las enfermeras del hospital Fernández, y el movimiento piquetero combativocontra el hambre en los comedores, el congelamiento y los despidos en el Plan Potenciar Trabajo. Los choferes de UTA se han autoconvocado por su paritaria. La UOM tuvo sus paros progresivos en la siderurgia. Al mismo tiempo que Télam lucha contra el cierre y los medios públicos contra la privatización, Aerolíneas Argentinas contra los despidos y la privatización junto a sectores autoconvocados aeronáuticos. El movimiento de lucha de los jubilados se ha unido y crece ante el enorme ajuste contra las jubilaciones y la derogación de la moratoria. En resumen, hay fuerza y disposición en la clase obrera. El paro del 9, contra las presiones de las patronales, las amenazas represivas de Bullrich, será un paso más para