Los vecinos del barrio UOCRA, ubicado en las afueras de la ciudad, enviaron imágenes preocupantes que reflejan el deplorable estado de las calles de acceso al barrio. Según comentan los residentes, durante los días de lluvia se convierten en “rehenes” de la situación, ya que no pueden salir ni ingresar con normalidad debido a los grandes charcos y baches que inundan las calles.
Durante esta gestión, los habitantes aseguran que las autoridades se comprometieron a solucionar esta problemática, prometiendo la construcción de un puente que mejoraría la situación del barrio. Sin embargo, afirman que estas promesas fueron simplemente una estrategia para obtener votos, ya que nunca se cumplió lo prometido.
Lo más frustrante para los vecinos es que, a pesar de que es la misma gestión, no se han visto avances en la resolución del problema. A pesar de las reuniones mantenidas con políticos locales y provinciales, los vecinos siguen sin respuestas concretas y la situación continúa empeorando.
“Nos sentimos utilizados”, expresan los residentes, quienes consideran que han sido objeto de promesas vacías y manipulación política. La falta de acción y la desidia de las autoridades ha generado un creciente malestar, ya que los habitantes del barrio se sienten ignorados y abandonados. Ante la constante indiferencia de los responsables, los vecinos reclaman una solución urgente y esperan que, en lugar de más promesas, se tomen medidas efectivas para mejorar las condiciones de las calles y garantizar su seguridad y bienestar.