Un análisis de riesgo realizado por agentes especializados de la Dirección General de Aduanas detectó graves irregularidades en una exportación de 28,78 toneladas de maíz partido con destino a la República Oriental del Uruguay. A raíz del hecho, el organismo emitió una alerta que finalmente resultó en la interdicción de la mercadería.
La investigación llevada adelante por el personal de la Aduana determinó que la compañía responsable de la operación no tenía capacidad financiera y económica acordes al volumen de la venta pretendida.
Los intercambios de información tributaria y aduanera permitieron realizar este hallazgo. El perfil elaborado en el análisis de riesgo es compatible con un tipo de operatoria irregular que la Dirección General de Aduanas viene denunciando con relación a los productos primarios, que tiende al incumplimiento de la debida liquidación de divisas en nuestro país.
Tras el procedimiento, desde Aduana declararon que “este accionar es el resultado de la profundización de tareas de fiscalización del comercio y la exportación de granos, que busca generar una mayor transparencia del sector y proteger a los productores agropecuarios genuinos de todo el país”.