El Gobierno nacional puso en marcha “Tenencia Express”, un nuevo trámite digital que busca agilizar la obtención del permiso para la tenencia de armas de fuego. Esta herramienta forma parte del Plan de Transformación Digital Integral de la Agencia Nacional de Materiales Controlados (Anmac) y estará disponible exclusivamente a través de la plataforma “MiAnmac”, accesible desde cualquier dispositivo con conexión a internet.

La medida fue formalizada mediante la resolución 45/2025, firmada por el director ejecutivo de Anmac, Juan Pablo Allan, y publicada en el Boletín Oficial. El nuevo sistema digital apunta a reducir los plazos administrativos sin dejar de cumplir con los requisitos legales y operativos. Para ello, incorpora controles automatizados que verifican los antecedentes del solicitante, así como su condición de revista si pertenece a las Fuerzas Armadas, de Seguridad, policiales o del Servicio Penitenciario.

Además de gestionar la solicitud de tenencia, “MiAnmac” permitirá tramitar de forma digital la Tarjeta de Consumo de Municiones (TCCM), necesaria para la compra legal de proyectiles. Todo el proceso estará integrado con la app “MiArgentina”, lo que permitirá realizar pagos y acceder a credenciales digitales desde un solo lugar. Las tarifas se expresarán en Unidades Anmac, garantizando transparencia y homogeneidad de costos en todo el país.

Este avance forma parte de una serie de reformas impulsadas desde diciembre pasado, cuando el Gobierno redujo de 21 a 18 años la edad mínima para la tenencia y portación de armas. A través de una modificación del artículo 55 de la Ley Nacional de Armas y Explosivos (Ley 20.429), se estableció que basta con alcanzar la mayoría de edad para poder adquirir, portar y usar armas de uso civil.

En paralelo, mediante la resolución 49/2025, también se eliminaron requisitos burocráticos para los comerciantes de armas y municiones, como la obligación de presentar habilitaciones municipales o inscribirse previamente en Anmac. Esta flexibilización está orientada a favorecer a pequeños comerciantes, talleres artesanales y fábricas con una producción anual inferior a 1.200 unidades.

Por último, la normativa autoriza a las fuerzas de seguridad a reutilizar armas decomisadas, siempre que estén correctamente registradas y almacenadas, con el objetivo de optimizar recursos y reducir costos operativos.