«El gobierno de Javier Milei ha roto su promesa electoral de que al ajuste lo iba a pagar la casta y no el pueblo trabajador», declaró Pablo Amarillo, dirigente del Partido Obrero en el Frente de Izquierda – Unidad. «En solo 10 meses, la pobreza ha aumentado a 52,9% de la población, lo que equivale a más de 25 millones de personas, y la indigencia ha alcanzado casi el 20%. Esto es un resultado directo de las políticas económicas del gobierno que benefician a los grandes capitalistas».
Por su parte, Amarillo criticó duramente la actitud de la oposición tradicional de la UCR y el PJ, incluido el kirchnerismo, como también a las centrales sindicales, que han apoyado o dejaron pasar las medidas del gobierno que perjudican a los trabajadores y los sectores populares. «La oposición de todos los partidos que nos han gobernado los últimos cuarenta años defiende los mismos intereses que el gobierno de Milei y le están dejando hacer el trabajo sucio que ellos no pudieron o no se animaron a hacer», dijo. «Han votado buena parte de sus leyes en el Congreso o han dejado pasar sus decretazos y vetos. Por ejemplo, Máximo Kirchner llamó a ‘no patalear’ por los vetos mientras CFK reivindica la flexibilización laboral, el ajuste fiscal y el repago de la deuda ilegítima. Por su parte la CGT ha pactado con Milei dejar pasar todos los ataques al pueblo a cambio de preservar su propia caja y la impunidad para sus negociados», recordó.
Sobre la necesidad de una movilización popular y la huelga general, Amarillo afirmó que «no podemos quedarnos de brazos cruzados mientras el gobierno genera un daño que será irreversible para generaciones enteras. Tenemos que profundizar y unir en las calles las luchas que están en curso y preparar la huelga general. Hemos llegado a un punto de que la necesidad de que se vaya Milei es imperiosa, porque solo así podremos evitar que siga creciendo la pobreza y la indigencia». Es por eso que desde el Partido Obrero “nos ponemos al frente del planteo de que se vaya Milei, un planteo que está creciendo en los sectores populares entre los trabajadores, estudiantes, jubilados y desocupados.
“Necesitamos un gobierno que asegure un salario igual a la canasta familiar y jubilaciones equivalentes al 82% móvil. Que triplique el presupuesto para salud y educación. Que prohíba los despidos y proceda al reparto de las horas de trabajo entre ocupados y desocupados. Que ponga en marcha un plan de obras públicas con énfasis en vivienda popular. Que termine con la fraudulenta deuda externa y que, sobre la base de la nacionalización del comercio exterior y del sistema financiero, se ponga en marcha un plan económico para los trabajadores que solo lo podrá garantizar un gobierno de los propios trabajadores”, destacó. «La consigna ‘Fuera Milei’ es un llamado a la acción», concluyó Amarillo.
