Las mismas se encuentran ubicadas en el Barrio San Isidro y fueron iniciadas en el año 2013 durante el gobierno del ex intendente justicialista, Carlos Schepens.
Días pasados el precandidato a la intendencia, Ing. Aníbal Steren, recorrió junto al equipo de Uruguay Se Puede, el Barrio San Isidro de Concepción del Uruguay y allí observaron el estado de abandono total de la obra del Barrio 80 Viviendas, las cuales han sido víctimas de varias irregularidades desde su inicio.
De un conjunto de las primeras 80 viviendas iniciadas por contrato en octubre del 2013 se giraron al Municipio local, durante la gestión del ex intendente Carlos Schepens, el 100% de los fondos y sólo se completó el 90% de los trabajos. Acá es donde están actualmente los vecinos del Asentamiento Tavella que relocalizó el Ex Intendente José Lauritto en el año 2018, es decir en la siguiente gestión.
“Del segundo grupo de 80 viviendas que dan frente al viejo Hospital se pagó el 70% y tiene un avance físico del 30% promedio. Incluso hay 17 viviendas sin iniciar”, expresó el precandidato Steren.
Según pudo saberse, “en el año 2013, durante el Gobierno de Cristina Fernández se giraban los fondos a los Municipios, y ellos derivaban las obras por contratación directa (sin licitación alguna) a un “consorcio” que se creaba especialmente para desarrollar los trabajos. En el caso de Concepción del Uruguay, las obras recayeron en un consorcio que tenía como presidente al Ing. Mario Acuña, el entonces secretario de Obras Públicas del Intendente Carlos Schepens, es decir, los funcionarios municipales se contrataban a sí mismos”, apuntó Steren.
Por esto, desde el Partido Vecinalista Uruguay Se Puede, quienes competirán en las próximas elecciones dentro de Juntos Por Entre Ríos, proponen al Municipio “que se realice una oferta a las familias que cumplan los requisitos del programa “Régimen de Regularización Dominical para la Integración Socio Urbana” y que estén en condiciones de terminar la vivienda adjudicada en un plazo razonable de hasta 24 meses y el Municipio como contraprestación realice la obra de infraestructura, tales como agua, cloaca, gas, red vial y veredas”.
“De esta manera se terminaría una obra más en la ciudad, se abrirían espacios nuevos en el Barrio San Isidro que impedirían la proliferación de roedores y mosquitos por el estado de abandono de la obra, varias familias lograrían su primera vivienda y, una vez más, por el trabajo conjunto entre Municipio y vecinos, se podría demostrar que cuando hay voluntad política, entre todos podemos hacerlo”, concluyó Aníbal Steren.