El objetivo de esta intervención no solo fue garantizar el cumplimiento de las normativas vigentes, sino también salvaguardar la salud pública. La ingesta de alimentos en condiciones inadecuadas puede acarrear serias consecuencias para la salud, incluyendo enfermedades y complicaciones derivadas de la intoxicación alimentaria.
El suceso tuvo lugar alrededor de las 19:45 en la intersección de la Ruta Provincial N° 32 y un camino vecinal del ejido de Seguí, donde se detuvo una camioneta Ford F100 ocupada por dos individuos residentes en Seguí. Durante la inspección del vehículo y sus ocupantes, se descubrió la presencia de un arma de fuego sin la documentación requerida, así como también la presencia de carne vacuna faenada, destinada claramente a la comercialización ilegal.
Aunque el animal faenado no fue identificado como producto de un robo, su transporte y destino para la venta sin el debido control sanitario bromatológico constituye una violación a las regulaciones pertinentes, lo que resultó en su decomiso inmediato.
El informe emitido por el Médico Veterinario a cargo reveló que la carne bovina no cumplía con los estándares sanitarios necesarios para su consumo, lo que llevó a su desnaturalización mediante incineración, siguiendo el protocolo establecido y documentado de forma fílmica y fotográfica.
Por otra parte, el Fiscal de Investigación y Litigación en Turno, Dr. Martín Wasinger, ordenó el secuestro del arma de fuego y la cartuchería asociada, identificada como una escopeta calibre .16 sin marca ni numeración visible, junto con los cartuchos correspondientes. Estos elementos fueron remitidos a la Sección Balística de la Dirección Criminalística como parte del proceso penal por tenencia ilegal de armas de fuego.
