La Resolución N.º 0888 de la Dirección de Recursos Naturales de Entre Ríos habilitó hasta el 27 de agosto la caza de las siguientes especies autóctonas: Sirirí Pampa (Dendrocygna viduata), Sirirí Colorado (Dendrocygna bicolor), Pato Picazo (Netta peposaca), Pato Barcino (Anas flavirostris) e Inambú Común (Nothura maculosa), además de la Liebre (Lepus europaeus). Las aves podrán ser cazadas únicamente en establecimientos de turismo cinegéticos, mientras que la liebre en todo el territorio entrerriano.
La polémica medida ve la luz en medio de duros reclamos y cuestionamientos desde distintos sectores de la sociedad al gobierno de Gustavo Bordet, a quien le vienen exigiendo la suspensión de la cacería de especies autóctonas.
Desde la ONG CEYDAS, Gabriel Bonomi indicó que “el Gobierno entrerriano no atiende el reclamo de la gran mayoría de la sociedad que pide a gritos se termine con esta práctica cruel y violenta que atenta contra el patrimonio natural de los entrerrianos”. Además, calificó a la medida de “irresponsable” y que implica “un enorme retroceso para la sociedad”. Según Bonomi, la resolución “se basa en estudios inconclusos solicitados por la principal promotora de la caza en el país; la Cámara Argentina de Turismo Cinegético y Conservacionismo (CATCyC), con el enorme sesgo que esto significa”.